martes, 26 de febrero de 2013

Por un sistema de educación de calidad...

Mucho se habla que tal o cual reforma al sistema educativo aumentara el nivel del mismo, pero realmente no se entiende como se medirá el incremento de la calidad o como las reformas ayudaran para que así sea. Solo se escucha de un lado lo beneficiosa que será, y del otro lo negativa que es para todos.

Es difícil de creer que sea toda buena o mala, y que realmente no haya un debate en el cual de ofrezcan alternativas para que la reforma realmente traiga un incremento en la calidad de la educación. Simplemente se espera que sea aceptada en su totalidad, o que sea rechazada totalmente. No hay realmente propuestas y contra propuestas por parte de toda la sociedad, que es lo que debería estar pasando en un tema de vital importancia como es la reforma educativa.

La reforma educativa es necesaria, pero es necesario que se de una manera integral tomando en cuanta el punto de vista de toda la sociedad. Todos vemos que el sistema educativo necesita mejoras urgentes, pero nadie tiene todas las respuestas ya que no todas las comunidades tienen las mismas necesidades en respecto que es lo que se necesita mejorar. El querer encontrar una solución única para todo, es irresponsable y miope, ya que genera más problemas que lo que resuelve.

La educación es uno de los pilares de la sociedad, y es necesario que sea una de calidad. Tiene que ser integral, que incluya todas las áreas del saber humano y que le de al individuo un alto nivel de cultural. Sobretodo debe fomentar la curiosidad y una mentalidad abierta, para que de esta manera fomentar una sociedad más justa y equitativa.

Cualquier reforma educativa que no mejore al calidad que se da en el sistema educativo, es un paso atrás y por lo tanto debe de ser evadido. Sobretodo, la reforma debe de provenir de un verdadero debate del cual forme parte toda la sociedad, no solo al gobierno y al magisterio.

Un sistema educativo de calidad es del interés de toda la sociedad, por lo tanto todos debemos participar en la mejor continua del mismo. Nuestro futuro depende de que así lo hagamos.

jueves, 21 de febrero de 2013

Escuchemos lo que otros tienen que aportar...

¿Hasta cuando dejaremos de asumir que todos tienen que llegar a la conclusión que nosotros llegamos? Nuestra conclusión no es la única correcta, o a la única que se puede llegar de manera lógica. Cada uno de nosotros concluye con la información que tiene disponible, y esta no es la misma para todos ya que no todos siempre tenemos acceso a la mismas fuentes.

Antes de asumir que los demás llegaron a la misma conclusión, primero tenemos que intercambiar información para asegurarnos que todos estamos partiendo del mismo punto. Una vez sentadas las bases, ya podemos comenzar a construir las conclusiones tomando en cuanta los puntos de vista de los demás. Es importante tomar en cuenta que hay que mantenernos atentos a nueva información que se vaya generando para ir agregándola para poder corregir el camino si es necesario.

Lo más importante, es nunca asumir que lo que nosotros concluimos es lo único que puede ser correcto.  Hay que mantenernos abiertos, y escuchar a otros antes de decidir si la información que traen a la mesa es relevante o no. Así podremos integrar aquella información que es relevante, y así poder tener los mejores elementos en nuestras manos.

Así como tu quieres ser escuchado, debes escuchar a los demás. En la medida de lo posible, es necesario que se este abierto a recibir información y criticas de aquellos que nos rodean. Sobretodo, debemos saber a quien tomar en cuenta para que aporte en la construcción de conclusiones que sean relevantes. No todos pueden aportar contribuciones del mismo valor en todos lo temas, ya que no todos somos expertos en todo. Pero no por eso, debemos dejar de al menos escuchar a todo aquel que quiera aportar algo.

Para realmente construir un mundo mejor, uno de los pilares principales es que realmente haya un intercambio libre de ideas para crear los proyectos que nos lleven al mundo que queremos ver.

lunes, 18 de febrero de 2013

No basta con manifestaciones o exigencias...

¿Hasta cuando la sociedad en general dejara de conformarse con exigir, o manifestarse? Cuando es cierto que con esto se puede generar la chispa para que las cosas cambien, raramente logran que se de un cambio permanente o tan profundo como se necesita.

Como ya se ha visto, cuando logran que haya algún tipo de acción esta es cosmética o sin la profundidad necesaria para que sea significativa. Solo se hace lo suficiente para que se pueda decir que se hizo algo, sin que tenga que ser un cambio de fondo. Se cumple con la expectativa de que se hizo algo, no con la expectativa de que las cosas cambien.

Lo que falta para que logremos consolidar un cambio real, es hacer lo posible para que las cosas cambien. Desde no tirar basura en donde no corresponda, hasta supervisar que se cumpla con aquello que quienes están en el gobierno se comprometieron. Hay mucho que se puede hacer a nivel personal, como a nivel comunitario, para que las cosas cambien.

Manifestar aquello que queremos, y exigir que se nos den los resultados a los cuales se comprometieron a cumplir, son solo el primer paso para que las cosas cambien. Pero, hasta que no sigamos esos primeros pasos con acciones propias las cosas no cambiaran.

Hagamos todo lo que este a nuestro alcance para lograr que llegue aquello que esperamos. No basta con exigirle a los demás que hagan algo, hay que exigirnos a nosotros mismos el hacer algo para cambiar aquello que queremos mejorar. No tenemos que conformarnos a que las cosas sigan igual, sin importar lo que nos digan.

Exijamos aquello que corresponda, manifestemos aquello que requiere atención, pero complementemos esto con acciones propias.

viernes, 15 de febrero de 2013

Visión a largo plazo...

Uno de los motivos principales del porque no tenemos un gobierno efectivo, es la falta de una visión de largo plazo. Sobretodo, que esta visión a largo plaza sea respetada independientemente de que grupo ocupe el gobierno en un momento dado.

Los proyectos que se implantan no dan los frutos esperados porque no se les da la continuidad necesaria, ya que son desechados cada vez que llega una nueva administración solo para implantar otros proyectos del principio. Lo peor es que los nuevos proyectos buscan erradicar los mismos problemas, incluso en ocasiones de las misma forma que el proyecto que reemplazo.

Esto provoca grandes ineficiencias en la gestión del gobierno, ya que no se le da tiempo a ningún proyecto de realmente solucionar los problemas para los cuales fue diseñado. El futuro de todos esta siendo puesto en riesgo por la visión de corto plazo de un gobernante que solo busca su propio beneficio. Tenemos que lograr anteponer nuestros intereses de largo plazo, a los intereses de corto plazo de un gobierno para realmente poder construir el futuro que tanto buscamos.

Todo proyecto, o cambio, debe abonar a los objetivos de largo plazo que tengamos. Muchas veces no es necesario quitar un proyecto para remplazarlo con otro, ya que simplemente con modificar algunos de los parámetros dentro del mismo es más que suficiente. Para que así sea, se tiene que hacer que cada proyecto sea planeado de forma correcta, y una vez puesto en marcha que sea administrado de manera que se mantenga en curso haciéndole las correcciones pertinentes cuando sea necesario. Y la conclusión del mismo solo tiene que darse cuando el proyecto llegue al fin de su ciclo de manera natural, no porque fue cerrado prematuramente por cualquier motivo.

Los proyectos deben dejar que se desarrollen de manera natural, y solo ser remplazados cuando ya llegaron a termino o demostraron que no son los adecuados para dar las soluciones que se esperan. No puede haber otro motivo para quitarlos, o no darles el presupuesto necesario para que se lleve acabo.

Es hora de realmente trabajar a largo plazo para construir el mundo que queremos ver.

martes, 12 de febrero de 2013

Para lograr aquello que realmente buscas...

Hasta cuando se entenderá que ser oposición es estar en desacuerdo con todo aquello que se proponga por parte de quien está den el poder, es realmente ser un contrapeso de este. O que el estar de acuerdo con algunos puntos tampoco te hace aliado de quien propuso aquello con lo que estás de acuerdo, ya que podrías estar en desacuerdo con otros puntos planteados.

En eso nos hace falta tanto madurez, como voluntad, ya que estamos dados a aceptar todo o nada. No hay capacidad para realmente ver lo que la otra parte nos propone, y realmente tomar aquello con lo que concordamos para trabajar sobre esto. Aquello que no vaya con nuestra forma de pensar, o no nos lleve a nuestro objetivo, tiene que ser sacada para que solo aquello que con lo que concordamos, o nos lleven a donde queremos estar, sea tomado en cuanta en el debate. El cerrarnos a que tiene que ser todo o nada, aparte de poco llevarnos a un debate poco saludable, es lo que nos tiene en la situación actual.

Es hora de despertar, y realmente entrar en debates con argumentos que nos lleven a construir aquello que buscamos. Para esto hay que dejar de pensar de que quien logre cumplir con su plan como originalmente lo propuso es quien gana, y pasar a pensar que solo ganamos si el objetivo de construir algo mejor es logrado.

El ceder en algunos puntos, para lograr el objetivo principal, es el único método por el cual todos los involucrados pueden ganar. El querer ganar todo nos lleva a que no logremos lo que realmente queríamos conseguir, incluso podemos perder incluso aquello por lo que en primer lugar nos sentamos a la mesa. Por eso tenemos que estar consientes de lo que realmente esperamos ganar, para poder soltar aquello que no nos lleve en el camino que nos lleve a ese objetivo que tenemos en mente.

El debate y la negociación, son nuestras principales herramientas. Sin ellas no lograremos avanzar, por eso es importante tener la voluntad para usarlas en el beneficio de todos. El no tener la voluntad de hacer uso de ellas no da los beneficios que esperamos.

viernes, 8 de febrero de 2013

Universidades y la innovación...

Las universidades, tanto publicas como privadas, no solo son centros de educación superior y de divulgación cultural. Son de vital importancia como motor de desarrollo de innovaciones en todas las áreas del conocimiento humano, sobretodo en aquellas que tienen mayor impacto social y en nuestra calidad de vida.

Es un deber de las universidades estar a la vanguardia en este tipo de investigaciones, para poder asegurar que los resultados de dichas innovaciones puedan ser puestos a disposición de la comunidad a la cual sirven de manera más rápida. El generar conocimiento nuevo e innovador, y ser líder en ello, no es opcional para las universidades.

Por el bien de todos, ya no se es suficiente con que las universidades solamente conserven e impartan conocimiento. Tienen que ir actualizándolo constantemente, de manera que siempre puedan difundir el conocimiento más actual para que la gente pueda trabajar con el mismo.

Sino no conjugan su labor de difundir educación y cultura, con el ir innovando y avanzando el conocimiento humano las universidades nos estarán dejando a deber a la sociedad. Como bien común de la humanidad, no pueden dejar a un lado esta doble labor.

Y para que lo puedan cumplir, la sociedad tiene el deber de asegurarse que tengan los medios necesarios para que puedan dar los resultados que se esperan de ellas. Tener universidades sanas es primordial para que las comunidades puedan desarrollarse en todo su potencial, y así construir un mejor mundo para todos.

martes, 5 de febrero de 2013

El gobierno y la confianza...

Es triste ver que la confianza en el gobierno no se basa plenamente en su desempeño, sino en que grupo partido político se encuentre en el. Esto es provocado debido a que el gobierno es visto como instrumento para que aquellos que estén en el hagan su voluntad, en lugar de ser el instrumento de la voluntad del pueblo.

La confianza en el gobierno debe de ser independiente de quien lo ocupe, basándose en el desempeño del mismo. De nada le sirve al pueblo un sistema de gobierno en el cual solo puede confiar si llega al mismo una persona, o grupo, en el cual pueda confiar. Un sistema de gobierno así debe de ser cambiado, ya que no sirve a los intereses del pueblo del cual emana.

El gobierno debe de tener los protocolos, pesos, y contrapesos, que permitan que su funcionamiento sea tal que provoque la confianza del pueblo independientemente de quien lo ocupe. El gobierno sirve para servir a los intereses del pueblo, no pare servir a los intereses de quienes lo ocupen en un momento dado.

Podemos o no estar de acuerdo con algunas de las acciones del gobierno, pero esto no debe de llevarnos a desconfiar del mismo. El gobierno no esta para que siempre haga lo que queremos que haga, sino para hacer aquello que tiene que hacer para garantizar una vida digna para quienes representa.

Cualquier gobierno existe para que los intereses de quienes represente sean el motor de su actuar, y los resultados de este actuar de frutos que beneficien dichos intereses. Los intereses de grupo no tienen cabida en el gobierno si estos dejan de lado los intereses del mayoría, ya que el gobierno es la voz de la sociedad en su conjunto.

Si ya no podemos confiar en el gobierno en si, es hora de cambiar el sistema en su conjunto.

La vida móvil.

La primera versión de  Android  que fue Android  KitKat , en el 2014. Cuando comencé a usarlo, no esperaba que Android se volviera mi sistem...