miércoles, 28 de agosto de 2013

Construyamos aquello que queremos ver...

Entre que el gobierno trabaja en tras bambalinas, y la apatía de una buena parte de la la gente sobre el que hacer de gobierno, no es de sorprender que el actuar de los políticos se mantenga en la opacidad y la impunidad.

Las autoridades tienen que trabajar de frente, y a favor, de la sociedad a quien sirven. Pero no actúan así porque a la mayoría no hacen porque se actuar sea este, sino que ya esperan que actúen del modo en el cual lo hacen pensando que es inevitable y que no se puede cambiar. Alguno incluso piensan que si deber como ciudadanos se limita a participar únicamente en las elecciones, y que cualquier otra forma de participación esta de más o fuera de su alcance.

Para que los gobernantes actúen de manera que nos beneficie, y que sea transparente, tenemos que hacer todo lo posible para que así sea de manera constante. De otro modo, seguirán actuando de la misma manera sabiendo que la mayoría no hará nada para que tengan que hacerlo de otra manera.

El señalar aquello que esta mal en el gobierno para solo quejarse, no lograra hacer nada para que las cosas sean diferentes. Tampoco lo hará votar cada vez que haya elecciones, ya que no los obligaremos a cumplir con sus promesas o dar los resultados que esperamos de ellos. Hay que encontrar los mecanismos para que tengan que cambiar desde la sociedad, no esperar que se den desde el gobierno mismo.

Todo cambio de raíz en todos sistema político no se da desde el gobierno, se da desde la sociedad que hace que se de el cambio que desea y después lo mantiene en el tiempo.

Hasta que no creemos consciencia de que el poder esta en nosotros, y que podemos ejercerlo, las cosas seguirán el curso actual. La resignación no es el camino a una mejor sociedad, sino la acción decidida para construirla día a día. Requiere un esfuerzo y compromiso, tanto con nosotros mismo como con los demás.

En nuestras manos esta el poder comenzar con la construcción de la sociedad que queremos, solo falta que nos decidamos a hacerla una realidad.

jueves, 22 de agosto de 2013

El significado de tu vida es el que tu le das...

El significado de nuestra vida, desde lo más pequeño, no se encuentra en el exterior. El significado de la vida es el que cada uno le da, y este debe ser lo que sirva de guía para el camino que tenemos que tomar para llegar al destino al cual queremos llegar.

De igual manera, el destino no esta ya predeterminado o es inmutable. Pero tampoco es siempre cambiante, nuestro destino no esta fijo en un punto y solo tiene los cambios que le demos nosotros mismos. Y aunque no estemos en control de todas la variables que están en juego para llegar al destino que perseguimos, si esta en nuestro pleno control el como llegar a el.

Lo externo no es de donde tenemos que buscar, o encontrar, el significado de la vida. Lo único que son señales que nos ayudan a encontrar el significado de nuestra vida por nuestra propia cuenta, ya que solo nosotros mismos somo quienes se lo podemos dar. Y aunque el significado que le demos a la vida puede ser compartido por otros, no tiene que ser el mismo para todos los demás. Cada quien esta en su derecho de dar el significado que quiera a su vida, y de perseguir su propio destino.

Incluso se puede tener más de un destino en la vida, incluso al mismo tiempo. El numero de destinos, depende de cada persona, ya que podemos tener distintos en las diferentes facetas de nuestra vida. Incluso estos se pueden ir concluyendo, o cambiando, dependiendo de la etapa de la vida en la cual nos encontremos.

El descartar destinos no es malo, si sabes cuando es el momento en el cual se tiene que hacer. Las cosas no siempre se dan como queremos, pero que en algún momento dejemos un destino a un lado no significa que no lo podamos retomar después. Con el tiempo se va adquiriendo la madurez para saber cuando tomar la decisión de dejar o retomar algún destino que teníamos en mente.

Nadie más puede forjar el destino, o destinos, que te propongas en tu vida. Mucho menos llenarla con el significado que le des.

domingo, 18 de agosto de 2013

El respeto al individuo...

El respeto hacia los demás no esta sujeto a cosas como sexo, religión, ideología política, o orientación sexual. A cualquier persona se merece respeto por el simple hecho de ser persona, independientemente de su situación individual.

Lo mismo va para los derechos que las personas gozamos, que tienen que estar protegidos legalmente y que todos debemos de gozar de igual manera.

Hasta que no se de esta condición, la sociedad en la cual vivimos no será justa ni igualitaria. Todo individuo tienen el derecho de esperar tener los mismos derecho que los demás, al igual de que estos sean protegidos por todos los gobiernos en todos los niveles. Nadie debe de ser tratado como ciudadano de segunda clase por cualquier circunstancia, o preferencia individual, mientras esta vaya en detrimento de la sociedad de manera negativa de forma evidente.

La sociedad en la cual los derechos de todos sean los mismos, y estén garantizados por el gobierno, realmente sera plena. Sobretodo, el no garantizar los mismos derechos para todos, llevara a un estancamiento de la social al no tener una diversidad suficiente como para que se sostenga en el tiempo a si misma.

La diversidad individual es vital para una sociedad saludable, y dicha diversidad solo puede surgir si a todos los individuos se les garantizan los mismos derechos independientemente de las diferencias que puedan tener con otros individuos. De no ser así, la sociedad tendrá una sentencia de muerte lenta y dolorosa generada por una homogeneidad que evitara su desarrollo al largo plazo.

Para poder tener una sociedad que sea viable al largo plazo, la diversidad individual dentro de la misma es necesaria. Claro, siempre tendrá que estar delimitada dentro de los parámetros del respeto a los demás para que así sea. Lo importante es encontrar el balance adecuado, en el cual tanto los individuos como la sociedad sean beneficiados para que se cree la simbiosis necesaria para el crecimiento de ambas partes.

jueves, 15 de agosto de 2013

Falta de visión a futuro...

La planificación urbana parece no entenderse, ya que en lugar de construir para las necesidades de las urbes a futuro no se pasa de reparar superficialmente problemas del pasado.

El futuro siempre alcanza, y por consiguiente sobrepasa, las necesidades que la ciudad necesita. Quienes tendrían que ver que los problemas no lleguen, viven solucionando los problemas que ya nos sobrepasaron o que ya perdieron su relevancia.

Hace falta que la planificación realmente sea vista de manera integral, y que los planes sean tengan la flexibilidad para ser modificados según sea necesario. Tratar de forzar a la realidad a los planes es algo que ha demostrado que esta destinado al fracaso, los planes tienen que irse ajustando a la realidad cambiante en la cual vivimos.

El mundo no esta estático, siempre va cambiando y las necesidades con este. Por eso planificación debe de ser contante, y siempre tener en cuenta que se tiene que hacer en caso de contingencias. Siempre hay que tener en cuenta que lo que se necesita hoy, no es lo mismo que se necesitara mañana.

Que se haya resuelto algo hoy, no significa que no volverá a ser necesario resolver de nuevo o que otro problema tome su lugar. De no mantenerse atento, ajustando los planes para prevenir en lugar de corregir, se seguirán resolviendo problemas que a la postre su solución sera irrelevante.

Claro que hay excepciones a la regla, estás deben ser atendidas en tiempo y forma. Lo importante es encontrar el balance entre los problemas que tienen que ser atendidos, y prevenir aquellos que pueden evitar que sucedan.

lunes, 12 de agosto de 2013

Lo que es ser escéptico...

El escéptico no es una persona que no tenga certeza alguna, o que sea incapaz de modificar su modo de ver al mundo. El escéptico tiene cosas en la cuales tiene certeza, y es capaz de cambiar de modificar su forma de ver la mundo.

Lo que define a un escéptico, es que antes de tener certeza en algo nuevo o de cambiar su visión de mundo, primero necesita que se de le la evidencia pertinente para poder aceptar la nueva información como verdadera. No esta cerrado a nuevas cosas, pero no acepta lo nuevo sin antes sopesar la evidencia de la validez de lo que se le presenta.

El ser escéptico implica el usar el pensamiento critico para analizar toda nueva información que recibe, para así tomar en cuenta aquello que se puede evidenciar o modificar de forma pertinente aquello que tenga que ser modificado.

El pensamiento critico es una herramienta que permite el pensamiento independiente, el evitar creer solo por que otros lo hacen o porque se nos dice que tenemos que creer en algo. Nos permite formarnos una visión del mundo de acuerdo a evidencias que nos lleven a tener una mejor comprensión del mundo con un algo grado de certeza.

Nos acerca a la verdad, y nos permite perfeccionar nuestro conocimiento conforme nueva información nos va llegando. Permite que diferenciemos entre información validad y falta, al buscar evidencias solidas acerca de aquella información que se va generando.

Claro no implica que no haya margen de error, ya que siempre hay la posibilidad de que algo se haya pasado por alto o sea falseado. Lo importante es que el ser escéptico no es ser cerrado a nueva información, o a cambiar aquellas cosas en las que tenemos certeza. Se hace cuando hay la suficiente certeza como para tener la confianza su veracidad.

viernes, 9 de agosto de 2013

Pleno derecho a votar y ser votado...

La ironía de que todo ciudadano tiene el derecho de votar y ser votado al cumplir la mayoría de edad, cuando en realidad vemos que se necesita el respaldo de un partido político es una que llegar a ser nociva tanto para el individuo como para la sociedad.

Para el individuo significa que no puede aspirar a ser votado, a lo cual tiene derecho, sin el respaldo de un partido político. Los partidos políticos no siempre representan los intereses de todos los individuos, por lo tanto es sano que el individuo que quiera postularse sin necesidad de estos lo pueda hacer sin impedimento alguno.

De igual manera, los partidos políticos no siempre postulan a candidatos que reflejen su sentir. Los cual los deja en una situación de tener que elegir entre candidatos que no son lo que la sociedad quiere en el puesto a elegir.

Incluso, los candidatos se llegan a deber más a los partidos políticos que la sociedad que los eligió, ya que saben que no pueden llegar a ser candidato sin su apoyo.

Las candidaturas sin necesidad de ser proyectados por partido político alguno son más que necesarias. Son necesarias para lograr que la política sea puesta al servicio de la sociedad, y no de algunos grupos con el monopolio de las candidaturas.

Hasta que las candidaturas estén a disposición de todo aquel que quiera participar, nuestra democracia no sera totalmente participativa. De nada sirve votar, y participar de manera indirecta, en la construcción de un mejor país si no podemos también ser votados sin que tengamos que tener un partido político que nos postule.

El momento a llegado de que la participación ciudadana se de en todos los aspectos de nuestra democracia, sin ningún tipo de limitante que la voluntad de querer formar parte de los procesos democráticos.

lunes, 5 de agosto de 2013

Las tradiciones son una cuestión de fondo, no de forma...

¿La tradición es realmente más importante que la gente? La realidad es que la tradición solo es una representación de lo que la gente dentro de cada comunidad valora. Así que la tradición solo es relevante mientras que la gente dentro de cada comunidad le asigne algún valor.

Aún así, es importante que la tradición debe aportar algo positivo tanto a la comunidad como al individuo. Si no es así, la tradición no tiene lugar y debe de ser remplazada o abolida. Una tradición que hace la comunidad mejor para el individuo, y viceversa, no ha de tener cabida ya que no fomenta que se genere un crecimiento o mejora para quienes que la practican.

Incluso, hay que tener en mente que las tradiciones no tienen que ser inmutables. Lo que se tiene que mantener en el tiempo, es el fondo no las formas. Lo que se tiene que seguir transmitiendo, es el significado de la tradición. Las formas pueden cambiar, para adaptarse a los tiempos para asegurar que el significado continué siendo transmitido.

El querer darle un mayor valor a las formas, que al fondo, solo logra restarle valor a la tradición. Las formas no tienen el menor significado, o valor, si perdemos de vista que es lo que queremos que se transmita o aprenda al realizaras.

Hasta que dejemos de pensar que la gente debe de servir a las tradiciones, y no las tradiciones a la gente, perderemos muchas de las cosas positivas que muchas de las tradiciones nos enseñan. Al igual, hasta que no dejemos atrás aquellas tradiciones que sean nocivas, no podremos avanzar en la construcción de un mundo mejor.

Llego la hora de realmente concentramos en el significado de nuestras tradiciones, para continuar con aquellas que nos den valor a nuestras vidas. Dejemos que sean parte de aquello que nos ayude a construir un mundo mejor, en cimientos fuertes.

Cosas que no hacen sentido en el trabajo.

Uno de los argumentos más ridículos que he escuchado cuando pido alguna información para sacar algo en el trabajo, es que lo pido para facil...