sábado, 22 de abril de 2017

Cada momento, y proyecto, tiene su cadencia...

En la actualidad, mucha gente no sabe discernir los diferentes tiempos, o compases, que tiene la vida tiene a cada momento. Hay quienes viven buscando la satisfacción inmediata, mientras otros añoran el vivir en un ritmo más pausado.

En otras palabras, muchos no saben distinguir el ritmo que lleva cada momento y eso les impide cambiar su marcha para disfrutarlo en su totalidad. Lo mismo paso cuando se embarcan en algún proyecto, no dejan que se desarrolle al ritmo que el proyecto necesita para madurar.

Todo esto lleva a que la frustración, y el estres que la acompaña, se incrementen de una manera desproporcionada. No disfrutamos los momentos que vivimos, o recogemos los frutos que esperábamos, simplemente por no saber distinguir el ritmo óptimo para poder obtener lo que esperamos que suceda.

La vida no tiene un solo ritmo, una sola cadencia.

Para poder vivir al máximo, tenemos que aprender a distinguir que ritmo tiene cada momento y proyecto. Nosotros somos quienes que tenemos que adaptarnos a ellos, ya que estos nunca se adaptar a nuestras expectativas. Por más que lo intentemos forzar a que lo hagan, es algo que solo nos causara frustraciones y decepciones mayores.

Y aunque tenemos cierta libertad sobre que momentos vivir, y que proyectos tomar, no tenemos completo control sobre el ritmo en el cual se desarrollaran. Pero si podemos controlar como los manejamos, y como nos hacen sentir.

La felicidad, y la plenitud, que tanto buscamos llegaran cuando tengamos la madurez de ver los estos ritmos y cadencias.

lunes, 3 de abril de 2017

El significado de ser humano en relación con el avance tecnológico...

El domingo pasado vi la película de Ghost in the Shell: Vigilante del futuro, y me gusto mucho. Es una muy buena adaptación del manga original.

Lo más interesante de la peĺícula, es que te hace reflexionar sobre la manera que  consumimos la tecnología y como va cambiando lo que significa el ser humano.

Aunque el avance tecnológico que aparece en la película no parece lejano, no hay que ir tan lejos para ver como consumimos la tecnología moderna de la misma manera. No pensamos dos veces en comprar un teléfono inteligente, computadoras, o otros dispositivos que nos facilitan la vida que no existían hace más de diez años.

Lo cierto es que el avance tecnológico no nos resta humanidad, más bien hace pensar sobre lo que significa ser humana. Incluso modifica su significado para incluir, o deja de lado, lo que es ser humano.

La humanidad no es la misma que hace 100 años, y será diferente dentro de 100 años. Lo que es ser humano va evolucionando con el tiempo, al igual las tecnologías a nuestra disposición. Ambas avanzan de la mano, y está en nosotros el elegir en que dirección nos llevan.

La relación entre nosotros y la tecnológica que desarrollamos es una calle de doble sentido. Nosotros tenemos un efecto en la tecnológica y esta tiene un efecto en nosotros. La tecnología que utilizamos es un reflejo de nosotros mismos, y aquello que valoramos.

Cosas que no hacen sentido en el trabajo.

Uno de los argumentos más ridículos que he escuchado cuando pido alguna información para sacar algo en el trabajo, es que lo pido para facil...