En cada proceso electoral, como el del estado de Morelos , firman acuerdos para garantizar la objetividad de las elecciones. Y, hasta el momento, nadie realmente confía los resultados al final del proceso electoral. Aunque es cierto que no se puede complacer con los resultados a todos, resulta conspicuo que proceso electoral tras proceso electoral quienes desconfían de los resultados son prácticamente todos quienes participan en el mismo proceso electoral. El que no se encuentre un mecanismo con el cual lograr que se pueda tener un alto grado de certeza de los resultados, habla de un gran problema de confianza en todo el sistema político. No es solo un problema de quienes organizan los procesos electorales, sino también de quienes participan en ellos y de la clase política en general. Que los mismos actores políticos pongan en duda cada proceso electoral, es algo que genera aun más desconfianza en el mismo. A tal grado llega dicha desconfianza, que ya se espera que todos los p...
Plantando semillas para construir un mejor futuro.