Este 2018 trajo muchas cosas nuevas consigo, tanto buenas cosas como malas. Aún así, el balance final es bastante positivo en general. Hay cosas que no me dejaron del todo satisfecho, aún así hubieron cambios cuyos cambios fueron mejores de lo que esperaba. Perdí gente, ciclos que se cerraron por diversos motivos salieron de mi vida. Mientras tanto, las relaciones con quienes valoro más se solidificaron y han pasado a otros niveles que aveces fueron inesperado. En lo laboral, los cambios continúan mientras otros comienzan a dar resultados. No todo fue tal cual esperaba, pero en general las cosas salieron para bien. El 2019 pinta como un año que trae muchos cambios más, mientras que otras tantas cosas se consolidaran. Es un año que pinta para bien, sobretodo porque a quienes tengo a mi lado son las personas que tienen que estar. Mientras que planeo conocer nuevos lugares, todavía me quedan por explorar muchos otros. Lo cierto es que el 2019 traerá muchas cosas consigo, ...
Plantando semillas para construir un mejor futuro.