Es hasta cierto punto triste que muchas ocasiones cuando la gente se organiza, no es para abrir nuevos caminos o buscar la conciliación. Generalmente, se ponen de acuerdo para atrincherarse en su posición.
Hace falta que se aprenda a dialogar, y a dejar de pensar que en todo debe de haber ganadores y perdedores. Cuando realmente se trabaja para construir consensos, se negocia para llegar a una solución que convenga a todos los involucrados para dar la solución que satisfaga a la mayoría.
No se tiene que satisfacer a todo el mundo, solo a quienes estén involucrados directamente. Y aún así, sí son grupos los que se encuentran en conflicto la solución tiene que dar satisfacción a la mayoría de las personas que los conforman.
Y en muchos casos, el gobierno no tiene que verse involucrado. En la mayoría de lo que pasa, la misma comunidad puede solucionar sus propios problemas de forma eficiente.
Esta en nosotros en crear esas avenidas de dialogo y construcción de consensos. Más que nada, faltan los foros donde los individuos podamos acudir para buscar las soluciones. Incluso, en ocasiones falta la voluntad para crear y participar en dichos foros.
Sobre todo, tenemos que comenzar a hacernos a la idea y participar en la creación de las soluciones que buscamos. Tenemos que dejar de esperar que el gobierno, o cualquier otro agente externo, nos de lo que buscamos en la mano. Por los que hemos visto al gobierno, nos ha demostrado en forma constante que solo busca llenar sus propios intereses y los de sus allegados.
Hay que organizarnos para crear redes sociales que den las soluciones que buscamos. En lugar de que busquemos el encerrarnos, deberíamos buscar el abrirnos a nuevas ideas y a otros grupos que busquen lo mismo que nosotros.
El cerrarnos a influencias externas, es una mala idea. Es la mejor manera de morir lentamente, todas las sociedades que cerraron se debilitaron son el tiempo hasta que murieron.
Además tenemos que estar abiertos a cambiar. Hay que adaptarnos a las nuevas circunstancias con las cuales nos vamos encontrando, y sacarles el mayor provecho que se pueda.
Sí queremos que las cosas sucedan, hay que hacer que sucedan por nuestra cuenta.
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