Es triste ver que no hay opciones reales para las elecciones de este año. Realmente no veo nuevas opciones, que den una verdadera opción para cambiar el rumbo que llevan las cosas.
Ningún candidato realmente esta comprometido con los cambios que necesitamos, ya que provienen de organismos políticos a quienes les conviene que las cosas no cambien. Y lo peor, es que hay muchos en la sociedad que por el desanimo que las cosas no mejoran preferirán no ir a votar.
Y que la inacción de la mayoría provoca que las cosas sigan empeorando, por no decir que igual.
Los que hoy están en el poder, dependen de la apatía de la mayoría. Al saberse seguros en su puesto, saben que lo único que realmente tienen que hacer es crear la ilusión de que hacen algo. Casi todo lo que hacen por la gente es meramente simbólico, ya que saben que la gente realmente no hará mucho por hacerlos cumplir lo que prometieron.
Es el resultado de la errónea idea de que con solo votar tenemos para esperar que las cosas cambien. También tenemos que seguir tras de ellos una vez que llegan al puesto para cual fueron electos.
Pero, también hay que tener en mente que los cambios que queremos tomaran tiempo en dar frutos. El sistema no cambiara de la noche a la mañana, hay que dejar que los cambios que se pongan en marcha cumplan su curso. Algunos darán frutos antes que otros, incluso tendremos que ir corrigiendo sobre la marcha.
Más, es necesario que trabajemos en forma constante para que las cosas cambien. Nada cambia por si mismo, hay que hacer un esfuerzo para que el cambio se de.
Y ese cambio tiene que darse desde la sociedad, los políticos ya han demostrado ampliamente su incapacidad para dar el cambio que les exigimos. Incluso se podría decir que, a pesar de todas sus promesas, no están dispuestos a realizar los cambios a los cuales se competieron.
Así que, a partir de ahora no basta con solo votar. Hay que hacer llegar los cambios desde la sociedad misma.
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